Elotes inconclusos

Recuerdo que pensé "como una pareja así, medio fresonsona, vende elotes afuera de la ISSSTE Tienda?". La duda se despejó cuando llegó otro señor, de ingresos más modestos a juzgar por su vestimenta, y les preguntó por el elotero. Nadie sabe a donde fue. Nadie sabe donde anda. Nadie sabe ni cómo es. Entonces?

Entonces, yo me sirvo, dijo presto el señor recién llegado. Acto seguido, abrió la elotera, pues efectivamente no había elotero alguno alrededor. Salió el humito, y antes de que acabara su expresión de sorpresa por la ligera quemada del vapor, ya la pareja inicial, que nadie sabe cuanto tiempo llevaban ahí, estaba alargando sus manitas para sacar los vasitos. Elotes en vaso, era la receta para los tres...

No supe como terminó la historia, pues después entré a la ISSSTE tienda por el mandado, siempre acompañado de la bella Marce. Cuando salimos, ya no estaban los tres comensales, pero sí la señora que asumimos venía los elotes, esperando clientes en silencio. En vez de preguntarle que había pasado, decidí dejar el episodio inconcluso para más tarde ponerle final. Escaparon los tres hambrientos con las panzas y bolsillos llenos? Dejaron el importe en un sobre?? Los cacharon en la movida y los cocinaron en la misma elotera??? Son esos elotes de grano... o dientes...?